A los pies del Veleta, donde las nubes abrazan a la montaña, se yergue el Centro de Alto Rendimiento de Sierra Nevada, un lugar idílico, elegido por la élite mundial del deporte para exprimir su preparación física y psicológica. Una de sus joyas es la piscina de 50 metros en la que los nadadores forjan medallas. Hasta allí se han desplazado algunos integrantes de la selección española que estará en los Juegos Paralímpicos de Tokio, para trabajar durante tres semanas en una especie de encierro monacal, aunque con todo lo necesario a su disposición para la puesta a punto.